Este templo de transición del gótico al renacimiento está realizado al exterior en mampostería y ladrillo, mostrando un aspecto y ornamentación sencillos. En el interior, la capilla mayor presenta una gran bóveda de tracería gótica y un retablo renacentista. Sus bienes más destacados son el órgano barroco y el Catafalco que se exhibe durante el mes de noviembre.